Tuesday, January 4, 2011
The charms of vocal music
by Pablo Bardin
For the Herald
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John Rutter (1945) has had success in England with his tonal, almost crossover music. A good example is his 1990 Magnificat, hardly sacral but certainly easy on the ear. It must be fun to sing, although it leaves no spiritual trace. Lasting only 35 minutes, the programme was surely too short. The concert took place at AMIJAI and was very agreeably sung by the Grupo Coral Divertimento (a big 96-voice amateur choir) under Néstor Zadoff and correctly accompanied by a 33-player orchestra. Pity that the soprano soloist (Patricia Douce) was weak.
John Rutter (1945) ha tenido éxito en Inglaterra con su tonal y complejizada música. Un buen ejemplo es su Magnificat (1990), apenas sacro pero ciertamente fácil para el oído. Debe ser divertido de cantar aunque no deje huella espiritual. Faltando sólo 35 minutos el programa era, sin duda, demasiado corto.
El concierto tuvo lugar en AMIJAI y fue muy agradablemente cantado por el Grupo Coral Divertimento (un gran coro amateur de 96 voces) bajo la dirección de Néstor Zadoff y correctamente acompañados por una orquesta de 33 músicos. Fue una lástima que la voz de la soprano solista (Patricia Douce) fuera débil.
